En una jornada marcada por la controversia y los gestos políticos, la sesión de la Convención Constituyente en Formosa vivió un momento de alta tensión cuando el bloque de La Libertad Avanza decidió abandonar el recinto. La decisión se dio en el marco del debate impulsado por el gobierno de Gildo Insfrán para reformar la Constitución provincial y consolidar el llamado “modelo formoseño”, vigente desde hace más de treinta años.
Los convencionales Paoltroni, Neme, Evans, Fridman, Miguez y Basualdo se retiraron de la sesión argumentando que no serían “funcionales al régimen” y calificaron la reforma como una “estafa al pueblo formoseño”. El gesto fue interpretado como una fuerte señal de rechazo a lo que consideran un intento de perpetuar un sistema político que limita la alternancia democrática.
Tras la salida del bloque opositor, el oficialismo formoseño representado por el sector de Gildo Insfrán continuó con la sesión, acompañado por miembros del radicalismo. El ambiente se tornó más distendido, con elogios cruzados entre ambos espacios que dejaron entrever un posible acuerdo político.
El convencional y actual diputado provincial Cacho García, referente del gildismo, no ocultó su afinidad con sectores radicales: “Tengo amigos en el radicalismo” y afirmó que la UCR busca la unión entre ambos con el gildismo, expresó, en lo que muchos interpretaron como una señal de acercamiento estratégico.
La reforma constitucional propuesta por el oficialismo busca consolidar institucionalmente el modelo político y económico que ha regido la provincia durante las últimas décadas. Sin embargo, sectores opositores advierten que esta reforma podría profundizar la concentración de poder y debilitar mucho más los mecanismos de control democrático.
La retirada de La Libertad Avanza marca un punto de inflexión en el proceso constituyente y plantea interrogantes sobre la legitimidad del debate en curso. Mientras tanto, el posible entendimiento entre el gildismo y el radicalismo podría redefinir el mapa político provincial.