Fernando Carbajal, ha empezado a atacar a la prensa (como si fuera funcionario gildista). “La prensa muestra la hilacha”, “periodistas machirulos”, “nuevos empleados de gildo”, “publican Fake News” porque sencillamente no le gusta que lo critiquen. No tolera el disenso. Va a Buenos Aires a todos los medios y le dicen de todo, inclusive le cortan el teléfono. Acá, inclusive hasta habría llegado a decirle a algunos medios, “Si no cambian el título de la nota, no les doy más reportajes”. ¡Ah bueno!
La libertad de expresión nos da a los comunicadores, interminables oportunidades de verbalizar nuestras alegrías, nuestras frustraciones, nuestros logros y nuestros enojos. De hecho no son los principales objetivos de nuestra profesión porque somos herramientas de comunicación pero no podemos evitar que las subjetividades, las ideologías nos comprometan con las historias que construimos y en las que quedamos atrapados tomando parte por el compromiso con la audiencia.
El periodismo en Formosa todavía no da para llevar adelante, investigaciones etnográficas, por razones económicas y porque sencillamente la inmediatez del consumo de noticias, hace que quienes nos movemos en una constante actualidad, no podamos profundizar en el desarrollo de miles y miles de temas que durante años, han quedado en las cavernas comunicativas del imperio de Gildo Insfrán.
Hoy lo urgente es lo político y la audiencia necesita comunicadores que no jueguen, aún con sus ideologías, un partido de fútbol dentro de la inmadurez política de los candidatos de la oposición. Candidatos que sin lugar a dudas van a provocar con sus delirios mesiánicos, la polarización de votos por ir separados. Candidatos que lejos de ponerse “en la piel” de los ciudadanos, parecen haber aterrizado del Palacio de Versalles, interpretando papeles muy similares al de los monarcas y tratando de convencer a la gente que ellos son lo único que los va a salvar del otro monarca que hace más de un cuarto de siglo, oprime a los formoseños.
Entre ambos se acusan de ser funcionales al régimen de Insfrán y en realidad, ambos lo son. Porque ninguno de los dos, a pesar de perder las elecciones, pierde nada. Todo lo contrario, por el lado de la primera minoría, a la que representaría el Diputado Nacional, Fernando Carbajal, seguiría siendo la primera minoría y los cargos quedarían más o menos igual para todos los empleados y asesores de la oposición (Que levante la mano el militante que no cobra un sueldo).
Carbajal seguiría en el Congreso de la Nación por haber sido electo, aun habiendo perdido las elecciones legislativas pero con el porcentaje apenas necesario para ser diputado nacional por la primera minoría y solo le restaría apostar a las elecciones nacionales como candidato a senador en octubre próximo (Ya que estamos). En el medio, están las listas donde van todos los amigos y familiares a la legislatura.
El rol de Francisco Paoltroni, tampoco es claro. Reticente a cualquier tipo de acuerdo para formar un frente. Asumido como “lo nuevo” (bueno por lo menos lo asume, no como el otro) y sin ningún tipo de estadísticas alucina que le va a ganar al aparato gildista con “un mano a mano”.
Es quien carga con el mayor porcentaje de sospecha acerca de la funcionalidad hacia el gobierno de Insfrán, porque ha crecido como empresario dentro de la provincia de Formosa, lo cual todos sabemos, no se logra si no es bajo un estado de gracia del feudal.
Ambos candidatos juegan a perder, sencillamente porque no se han unido. Uno dice que hizo todo los posible para lograr la unidad, cuando lo que le ofrecieron al otro era un paquete donde solo podía ser vicegobernador, el otro dice que quiere encuestas cuando ya no hay tiempo, antes decía que no quería encuestas porque no había tiempo (había más tiempo que ahora). Ahora se dedican a acusarse de quien es más gildista.
En esta lamentable telenovela de dos inexpertos, llevando el destino de los formoseños al octavo período de gobierno de Insfrán (porque no les importa), la soberbia de ambos demuestra a las claras cual va a ser el resultado de las elecciones, si las hubieran.
Pero hice una introducción un poco extensa porque de ambos candidatos, Fernando Carbajal, ha empezado a atacar a la prensa (como si fuera funcionario gildista). “La prensa muestra la hilacha”, “periodistas machirulos”, “nuevos empleados de gildo”, “publican Fake News” porque sencillamente no le gusta que lo critiquen. No tolera el disenso. Va a Buenos Aires a todos los medios y le dicen de todo, inclusive le cortan el teléfono. Acá, inclusive hasta habría llegado a decirle a algunos medios, “Si no cambian el título de la nota, no les doy más reportajes”. ¡Ah bueno!
No falta mucho para que empiece a negarse a los llamados telefónicos de periodistas locales, como en mi caso porque seguramente, no le cae bien lo que digo. De hecho, otros candidatos de la oposición lo hacen, están más ocupados que funcionarios de Insfrán.
Ninguno de ellos, se presta a desmentir lo que aseguran es una “Fake News”. Dan entrevistas a su prensa de bolsillo y se quejan de uno, en todas las radios menos en donde trabajo. Hablan con todos los periodistas “ensobrados” menos conmigo que es al que critican.
Así escucho que no solo Carbajal, me dice de todo en las redes, en otras radios, sino también, Ricardo Buryaile, por notas que por simple sentido común, si yo las hago, las debería hablar conmigo, supongo. Salvo que no se animen a hacerlo.
Pero dejemos a Buryaile, que anda buscando una senaduría con el financiamiento del dinero de los jujeños, Gerardo Morales ¿Cómo senador por Jujuy? No, como senador por la primera minoría por Formosa. La joda es total.
Carbajal, se ha apropiado de la lucha de muchos formoseños que estuvimos, más allá de nuestra profesión de periodistas, en todas las marchas por los abusos en pandemia del tirano de Insfrán. Nosotros confiamos en él, tan solo por hacer su trabajo de juez federal, haciendo cumplir la Constitución Nacional. Bueno tuvo un pequeño “surmenage” cuando se sintió abrumado por el ataque del Ministro “orejero” Jorge González y se declaró incompetente.
En ese momento, yo haciendo columnas a las 6 de la mañana para canal 7 (está grabado) le recomendé a Carbajal que si se sentía incompetente para defender la Constitución Nacional, fuera a hacer reiki a su casa para restablecer el equilibrio físico, mental y espiritual y de paso renunciara.
En ese momento también denunciaba en las columnas y en radios regionales, que violaban la Constitución Nacional, cuando no permitían ingresar a los formoseños en Mansilla. Mucho antes que cualquier abogado (lo aclaro y está grabado repito). El primero fue el Dr. Carlos Lee, quien hoy es asesor de Carbajal y que aparte está casado con una funcionaria del juzgado federal por lo cual muchos trámites, entran como por un tubo. Después llegaron los demás.
Antes de que Carbajal fuera siquiera candidato, el que ponía la cara todos los días frente al desagradable de González y me amenazaban con causas (tengo varias iniciadas) era yo. Él no estaba en la calle, salvo las inspecciones en la escuela de cadetes, Carbajal, al salir de la depresión pos González, estaba cómodamente con el Split de las oficinas del juzgado federal.
Antes de que a Carbajal le ofrecieran el oro y el moro, Naidenoff y Buryaile, porque no tenían candidatos, fuimos a Clorinda, donde los clorindenses me aplaudieron en el anfiteatro de la Plaza de la Madre por haber sido su voz en las conferencias del COVID. Todos lloramos juntos.
Estuve en cada una de las marchas, transmitiendo siempre en vivo. Trabajé para TN, A24, La Nación, Infobae, etc. Después se sumó la Dra. Neme, Julieta González y por su valentía ambas lograron el reconocimiento de la gente. Carbajal seguía en su oficina.
Mucha otra gente como los comerciantes, gastronómicos y familias que querían a sus hijos en la escuela fueron a las marchas. Llegó el 5 de marzo y la brutal represión del dictador Insfrán. Carbajal seguía en su oficina.
Carbajal recién salió de su oficina, cuando Buryaile y Naidenoff le garantizaron que el aparato de la UCR le daría apoyo irrestricto.
Hoy, Fernando Carbajal, es diputado nacional en razón de la pandemia pero solo ha tomado intervención desde una oficina y así y todo se estresó. En el caso del Francisco Paoltroni ni siquiera existía en el escenario de violaciones de los derechos humanos en Formosa. Estaba haciendo negocios.
Podría seguir pero a la vista de los ataques del candidato a gobernador, me siento en la obligación de ubicarlo en su palmera. Se apropió de la lucha de otros, de hecho en cada situación donde se proyectaban imágenes de las marchas y la represión, el quedaba pintado al óleo al lado del protagonismo de otros dirigentes.
Por eso, no sé de donde tiene tantos humos como legislador oportunista como para asumir que puede atacar, ofender, etiquetar a los que realmente le ponemos el pecho a la lucha. Ojo, lo hacemos todos los días y no desde el salón de los pasos perdidos tomando un café.
Los eternautas, me vienen atacando desde el año pasado, Zárate y Buryaile. Naidenoff por lo menos no ataca y lo hacen porque no pueden defender sus reelecciones, continuas o no. Avalado por el aparato de la UCR. Avalado también (y esto lo reconozco) porque soy insoportable.
Pero nunca pensé que un candidato “pochoclo” de la oposición me acusaría de trabajar para el gildismo y Carbajal lo hizo. Debe pensar que todavía es juez federal y tiene algún tipo de prelación social que desconocemos.
Difícil inventar una vida política, con fotos de la franja morada, hace 30 años. Pero tampoco está mal, es una forma de darse peso específico político.
Ahora para cerrar esta catarsis, le pido Fernando, no se meta con la prensa. Rebata los argumentos que deba, desmienta las notas que crea pero no descalifique, no puede meterse conmigo. Tengo más vida política y muy intensa que Ud. en los últimos 20 años. Combato el régimen desde siempre, no tengo paréntesis en mis luchas por un puesto de confort.
Pero por sobre todas las cosas, no vivo la vida loca, como todos los que van al Congreso, subvencionados con plata de los contribuyentes, mientras los formoseños la pasamos mal. Péguese un baño de humildad, todos tenemos a un tirano enfrente, pero nosotros lo sufrimos todos los días, no nos tomamos un avión todas las semanas para ir a tomar un café a la confitería del Molino.
Espero no se enoje y recapacite. Agradezca que la Corte Suprema quizás le allane la llegada al gobierno si inhabilitan a Insfrán pero no joda a la prensa. Saludos. (Periodismo Profesional).