En un contexto de creciente tensión política, el municipio de Formosa se encuentra en el centro de un presunto plan de desgaste y desestabilización orquestado por el gobierno provincial. Este plan, según diversas fuentes, estaría siendo ejecutado por el Sindicato de Trabajadores Municipales de Formosa (SITRAMF), liderado por el controvertido dirigente y ex diputado gildista, Coqui Zarza.
Zarza, conocido por su alineación con el gildismo y su cercanía al gobernador Gildo Insfrán, ha sido señalado como el principal artífice de las recientes manifestaciones en contra del intendente Jorge Jofré. A pesar de su posición, Zarza no cuenta con el respaldo de la mayoría de los empleados municipales, quienes lo ven más como un representante de los intereses del gobernador que como un defensor de sus derechos laborales.
Las manifestaciones organizadas por SITRAMF, que rara vez superan las veinte personas, han sido vistas por muchos como un intento de crear una imagen de descontento generalizado que no refleja la realidad. Los trabajadores municipales, en su mayoría, no consideran a Zarza como un referente legítimo debido a su historial de no apoyar sus reclamos y de estar más enfocado en los intereses políticos del gobernador.
La manifestación más reciente, llevada a cabo este miércoles frente al municipio, ha puesto en evidencia las divisiones internas del Partido Justicialista (PJ) provincial. Los reclamos por mejoras salariales, aunque legítimos, deberían dirigirse al gobierno provincial, ya que es el responsable de la distribución de los fondos de coparticipación. La insuficiencia de estos fondos ha dejado a los municipios sin la capacidad financiera para implementar aumentos salariales significativos.
En respuesta a esta situación, la oposición, liderada por el radicalismo, ha presentado un proyecto de ley en la legislatura provincial para reformar la Ley 766 de reparto de la coparticipación. Esta reforma busca garantizar que ningún trabajador en la provincia reciba menos de lo que el INDEC establece para la Canasta Básica Alimentaria. Esta iniciativa podría ser un paso crucial para asegurar una distribución más equitativa de los recursos y mejorar las condiciones salariales de los trabajadores municipales.
El conflicto en el municipio de Formosa es un reflejo de las complejas dinámicas políticas y económicas de la provincia. Mientras los trabajadores municipales continúan luchando por sus derechos, la necesidad de una reforma en la distribución de los fondos de coparticipación se hace cada vez más evidente. La situación actual subraya la importancia de una gestión transparente y equitativa de los recursos públicos para garantizar el bienestar de todos los ciudadanos.