Press "Enter" to skip to content

Le apuntaron con un arma en la cabeza una mujer para robarle la moto que “todavía paga la cuota” y usa para trabajar

La víctima, Emilia Ferreira, de 35 años y madre de un adolescente, relató el dramático episodio que la dejó en shock y sin su único medio para trasladarse hasta su empleo. Sucedió este martes 13 de mayo, a las 6.50,  en la intersección de las calles Tatú Carreta y Laguna del Desierto. Por el hecho, que tuvo lugar en el barrio Carpincho Macho, aún no hay detenidos. 

Camino a su trabajo, una vecina de Resistencia vivió momentos de auténtico terror cuando fue interceptada por dos personas armadas que, sin dudarlo, la asaltaron y le arrebataron la motocicleta que todavía está pagando. 

Inseguridad en Resistencia: le apuntaron con un arma en la cabeza para robarle la moto que todavía paga y usa para trabajar.

Era una mañana como cualquier otra para Emilia, quien partió desde Villa Federal hacia su trabajo conduciendo su Motomel Blitz negra, 110 cc, que había adquirido en cuotas hace tan solo siete meses.

Su rutina se transformó en pesadilla al llegar a la intersección de Tatú Carreta y Laguna del Desierto, cuando dos hombres en una moto similar, una Honda Biz roja, la abordaron. De acuedo al testimonio de la mujer, la estrategia fue violenta: uno de los asaltantes le tomó el manubrio y el otro la obligó a detenerse a punta de pistola, poniéndole el arma en la cabeza.

“Solté la moto porque me apuntaron directo, todavía estoy temblando”, confesó Emilia, quien no solo perdió la motocicleta, sino también todas sus pertenencias: documentación, celular, bolso y hasta el casco. “El que tenía el arma me empujó hacia la vereda y parecía querer sacarme de algo más, pero le dije que no tenía nada más”.

Totalmente desprotegida, Emilia fue hasta la policía para asentar la denuncia, aunque hasta el momento no se recuperó nada y en la zona no hay cámaras que puedan ayudar a identificar a los atacantes. Lo más doloroso para ella no es solo el trauma sino también la pérdida de la moto, por la que seguirá pagando cuotas hasta fin de año: “Es la única manera que tengo para llegar a mi trabajo y sostener a mi hijo“.

A pesar de este durísimo golpe y de haber sido anteriormente víctima de otro robo, Emilia siente que la inseguridad le arrebató la tranquilidad y la libertad de moverse por la ciudad. “Ahora no sé cómo voy a seguir, estoy pagando la moto y es mi único medio de movilidad, solo quiero sentirme segura al salir a trabajar todas las mañanas“, concluyó, aún con la voz quebrada por el susto.

(Diario Norte).

Comparte si te a gustado: