Este viernes por la madrugada, interceptaron a un taxista en la ciudad de Rosario por manejar en contramano. Al detenerlo, los agentes municipales le efectuaron exámenes de alcoholemia y narcolemia. Los resultados revelaron un nivel de alcohol en sangre de 1,75 gramos por litro y un test positivo de marihuana.
La policía, al observar que el vehículo circulaba a contramano, procedió a detenerlo y seguir los protocolos establecidos en estos casos. Inmediatamente, convocaron a los agentes de la Dirección General de Tránsito para realizar los controles pertinentes.

Una vez confirmado el estado de intoxicación del conductor, una grúa remolcó el taxi al corralón municipal. Las autoridades elevan las actas correspondientes al Tribunal de Faltas y a la Secretaría de Movilidad, quienes determinarán las sanciones adecuadas, considerando la gravedad de la infracción y el hecho de tratarse de un conductor de un servicio público.
(Aire de Santa Fe).