Los reclusos no recibirán atención en el Hospital Provincial de Rosario hasta nuevo aviso tras el asesinato de Leoncio Bermúdez, el subinspector al que le quitaron la vida a tiros por sicarios que buscaban a Gabriel Lencina, interno del penal.
Un comunicado adheridoa la puerta del hospital también señala que los informes médicos se proporcionarán telefónicamente. Además, comunicaron que varias especialidades médicas no estarán disponibles o tendrán servicios mínimos.
Representantes de la institución indicaron que las directrices de seguridad permanecerán en vigor “hasta que se implementen las medidas de seguridad adecuadas“.
De esta manera, el hospital que solía atender a presos de distintas cárceles de Santa Fe permanecerá cerrado en protesta por la falta de seguridad tanto para el personal médico como para los pacientes.