La Policía en colaboración con agentes municipales, desactivó dos fiestas clandestinas durante la madrugada, donde se encontraban casi 300 personas, en su mayoría menores de edad, y se registraba un alto consumo de bebidas alcohólicas.
En un operativo preventivo realizado en la madrugada del 3 de noviembre, la Policía de Misiones logró clausurar dos fiestas clandestinas que ponían en riesgo la seguridad de numerosos menores. La primera intervención tuvo lugar alrededor de la 1 de la madrugada en la calle Paraguay, cerca de José Hernández, en Oberá. La policía fue alertada sobre una celebración no habilitada donde se sospechaba que había menores consumiendo alcohol. Al llegar al lugar, los agentes confirmaron la denuncia y procedieron a desalojar el predio, notificando al propietario, un hombre de 52 años, de las irregularidades.
La segunda operación se llevó a cabo a las 3 horas en Apóstoles, en la avenida Humada Ramella, donde los agentes encontraron casi 150 personas, en su mayoría adolescentes. Tras una inspección, se clausuró el evento y se secuestraron las bebidas alcohólicas presentes. Los menores fueron entregados a sus tutores para garantizar su seguridad.
Los organizadores de estas fiestas ilegales han sido notificados y deberán presentarse ante el Juzgado de Faltas correspondiente. Este tipo de operativos subraya el compromiso de las autoridades de Misiones para proteger a los menores y garantizar un ambiente seguro durante las festividades.
(MisionesCuatro).